Mazda 3 MPS 2010

Mazda ha revelado algunos detalles más acerca de su compacto más portente, el Mazda 3 MPS. El avanzado motor, junto al conversor catalítico hacen que este coche ofrezca un mayor rendimiento, con menor consumo y emisiones.

El frontal introduce uno de los detalles más característicos de este “hot hatch“, la entrada de aire en el capó. A diferencia de otros coches esto no es un elemento ornamental, sino funcional que se aprovecha para refrigerar el intercooler. La parrilla y parte baja de la defensa comparten el mismo color negro metalizado y están enmarcadas por unos faros bi-xenon cilíndricos y los faros antiniebla de forma redondeada.



En la parte trasera nos encontramos con un alerón flotante, que complementa la agresiva estampa del frontal a la perfección. Las ópticas traseras siguen la línea del resto de la gama Mazda y usan tecnología LED, estas incluyen una lente interior para aportar mayor claridad cuando no están iluminados.

La aerodinámica se encuentra entre las mejores de su sector, gran parte del coche ha sido diseñado con el fin de mejorar este factor que puede mejorar la estabilidad o arruinarla por completo. Empezando por las defensas delantera y trasera, los retrovisores y la estudiada forma del pilar A, todo se ha realizado con la circulación del aire en mente.

Las llantas realizadas en aluminio comparten diseño con las que nos podemos encontrar en el Mazda RX-8, los neumáticos que monta en fábrica son unos Dunlop 225/40 R18.



Sin llegar a los 300 CV del Ford Focus RS, el Mazda 3 MPS no se queda nada corto, su motor MZR 2.3L DISI Turbo entrega nada menos que 260 CV a 5.500 rpm, el par motor se mantiene constante en unos generosos 380 Nm. El coche es capaz de llegar perfectamente a 250 km/h gracias a la rigidez de su chasis y de pasar de 0 a 100 km/h en 6.1 segundos.

La inyección directa garantiza una menor temperatura de la cámara de combustión gracias a un atomizado del combustible a alta presión. El resultado es una curva de par plana, que sólo necesita un turbo para hacer las delicias del conductor, el intercooler mantiene constante su tamaño pero gracias a la nueva entrada de aire se garantiza una eficiente refrigeración.



La eficiente mecánica cumple la normativa Euro 5, el consumo se reduce de los 9.7 l/100 km de la anterior generación a 9.2 l/100 km en ciclo mixto.

La transmisión elegida es una manual de seis relaciones, a diferencia de las cinco relaciones del anterior modelo. Cada marcha llega ahora hasta una velocidad más elevada para una conducción más silenciosa.



La suspensión anterior es de tipo MacPherson, para el eje trasero la elección ha sido una multi-link. Los estabilizadores han sido mejorados para alcanzar un comportamiento más lineal del balanceo. Una mejorada dirección asistida electro-hidráulica se adapta a la velocidad de circulación, a bajas velocidades el nivel de asistencia aumenta, volviéndose más firme a medida que se acelera. Esta dirección es directa y precisa, con 2.7 giros del volante entre topes.

El interior en colores negro y rojo está protagonizado por unos envolventes asientos tipo semi-bucket. El salpicadero está estratégicamente orientado hacia el conductor, con un nuevo indicador de carga del turbo en forma de pantalla LED.